Alberto Nanclares

Variedades:

Albariño 100%

Características:

Alberto Nanclares es un vino blanco monovarietal elaborado con la variedad de uva Albariño. Tiene una graduación alcohólica del 11.5% Vol y está elaborado por la Bodega Nanclares y Prieto. Pertenece a la Denominación de Origen (DO Rías Baixas).

Elaboración:

Soverribas, Praeira (Facho), Tomada de Juana, Albarellos, Senra, Gandarela, Freixido e Monte Xago son los nombres de ocho fincas propias repartidas en los municipios de Cambados y Portas, donde se cultivan viñedos en parra. Estos viñedos se caracterizan por tener una orientación noreste en la finca Soverribas y sureste en el resto de las fincas.

Las cepas de estos viñedos tienen edades que oscilan entre los 15 y 95 años, lo que aporta una gran diversidad y complejidad a los vinos producidos. El suelo varía según la finca, siendo Xabre (granito descompuesto) en las fincas de Tomada de Juana y Albarellos, y franco-arenoso de roca granítica en el resto.

El clima en esta región es atlántico, lo que influye en la calidad y carácter de los vinos. La vendimia se realiza de forma manual, seleccionando los racimos en el propio viñedo y utilizando cajas de 15 kilogramos.

En cuanto a la vinificación, se prensa la uva sin despalillar en una prensa neumática a baja presión. La fermentación alcohólica tiene lugar en cinco barricas de roble francés usadas, provenientes de las tonelerías Demptos, Dammy, Radoux y Doreau, con capacidades de 450 y 500 litros. Durante este proceso, se utilizan las levaduras propias de la uva, sin desfangar y sin añadir ningún tipo de producto, excepto SO2. Además, se realiza un bâtonnage semanal durante 3 meses.

Después de la fermentación, el vino pasa por un período de crianza de 9 meses sobre sus lías, lo que le aporta mayor complejidad y textura. Finalmente, se embotella sin realizar una estabilización tartárica por frío, sin clarificar y con un filtrado de desbaste y dosis moderadas de SO2.

Cata:

Se presenta con un color blanco presenta un color amarillo pajizo muy limpio y brillante, con destellos verdosos que le dan un aspecto fresco y vibrante.

En la nariz, se pueden percibir notas de frutas tropicales como el maracuyá, el plátano y el lichi, que le aportan una dulzura exótica y jugosa. También se aprecian toques florales de hinojo, que añaden un toque de frescura y delicadeza al conjunto. Además, se pueden distinguir sutiles matices balsámicos, que le dan un toque aromático y distintivo.

Al probarlo, este vino blanco ofrece una experiencia refrescante y frutal, que se combina a la perfección con notas florales. Las sensaciones de fruta con hueso, como el melocotón o la ciruela, se entrelazan con los toques herbáceos verdes, que le aportan un carácter fresco y vibrante. Además, se puede apreciar un ligero matiz lácteo, que le da una textura suave y cremosa al paladar. El final es elegante y agradable, con un sutil amargor vegetal que le aporta complejidad y equilibrio al conjunto.