Tino

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20,00 €

Tino, un vino único elaborado a partir de la variedad blanca Alvilla, es una joya poco conocida que no forma parte de las variedades permitidas en el Consejo Regulador de Ribeiro. Esta uva, que estuvo al borde de la extinción, fue rescatada por el padre de Manuel Formigo, quien decidió rendirle homenaje bautizando al vino con su nombre.

La producción de Tino es extremadamente limitada, lo que lo convierte en una rareza en el mundo de los vinos. Sin embargo, su calidad y carácter excepcionales hacen que valga la pena buscarlo y disfrutarlo.

Graduación	12.5% Vol
Presentación	75 cl
Tipo de uva	Alvilla do Avia

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Información sobre Tino

Variedades:

Alvilla do Avia 100%

Características:

Tino es un vino blanco monovarietal elaborado con la variedad de uva Alvilla do Avia. Tiene una graduación alcohólica del 12.5% Vol y está elaborado por la Adega Manuel Formigo. Pertenece a la Denominación de Origen (DO Ribeiro).

Elaboración:

Las Fincas Miñoteira y Portela son conocidas por producir vinos de alta calidad. Su especialidad son las cepas seleccionadas de Alvilla, lo que garantiza un sabor excepcional.

El suelo en el que se cultivan estas cepas es de granito evolucionado, conocido como sábrego, que se asienta sobre una roca madre muy dura. Este suelo tiene la particularidad de contener piedras y gravas, lo que mejora la insolación de los racimos de uva y contribuye a la calidad del vino.

El clima en esta región es Atlántico, lo que proporciona condiciones ideales para el cultivo de la vid. La vendimia se realiza de forma manual, con una selección cuidadosa de los racimos directamente en la cepa. Además, se transporta la uva en tractores con cargas de menos de 150 kilogramos, para asegurar que llegue a la bodega en perfectas condiciones.

En la bodega, se lleva a cabo una vinificación cuidadosa. Primero, se realiza un estrujado suave de la uva, seguido de un prensado en una prensa neumática semicerrada. Es importante destacar que el mosto nunca se somete a una presión superior a 0,2 bar, lo que garantiza la integridad del vino.

Después de un cuidadoso proceso de vinificación, el vino se embotella. Este tiempo de espera permite que los sabores se desarrollen y se integren, resultando en un vino excepcionalmente equilibrado y delicioso.